Entrevista con Guillermo García Alcocer, Ex Comisionado Presidente de la Comisión Reguladora de Energía.

Visión de la Nueva Administración: ¿Cuáles son sus perspectivas respecto a la política energética que propone la presidenta Claudia Sheinbaum?

¿Cuál sería tu perspectiva respecto a la política energética de la presidenta Claudia Sheinbaum?

Gracias por la invitación, un gusto estar en este nuevo esfuerzo que estás encabezando para la revista y bueno pues hay que llenar de contenido relevante, o sea, estar muy atento a las señales. Hay ahora un mapa un poquito vago en términos de hacia dónde quiere ir ahora la nueva administración, se habla mucho de la transición energética, de cómo contribuir a que México tenga un papel decidido en el combate al cambio y a la emergencia climática y creo que es un objetivo muy loable, muy interesante, que no teníamos en los últimos 6 años.

Esto un tema que se dejó de lado y creo que ya el que se ponga en el centro el objetivo de tener una actuación en torno a nuevas energías, a menores contribuciones a efectos de gas invernadero, al tema de mejores sistemas de transporte y a mejores condiciones en términos ambientales con teleféricos, autos eléctricos, camiones eléctricos, etcétera, creo que es una señal buena. O sea, creo que lo que nos están dando hasta este momento es un objetivo macro que falta aterrizar, ha habido mensajes en el sentido de que Pemex se podría convertir en una empresa de energía como ya lo hicieron Total, las empresas noruegas, las empresas de Inglaterra; BP ya no es British Peroleum, ya es BP, quitaron el nombre abierto para poder permitir a la empresa convertirse en una empresa de energía,  creo que es una macrotendencia que está adoptando el gobierno entrante y creo que muy interesante, nada más el tema es empezar a llenar los espacios.

Comparación con Administraciones Anteriores: ¿Cómo cree que la política energética de Sheinbaum se compara con la de su predecesor, el presidente Andrés Manuel López Obrador?

Comparado con las administraciones pasadas, ¿cómo compararías la política de Claudia en base a lo que se vislumbra comparado con lo anterior?

Yo lo que veo es que han sido varias declaraciones que indican que van a requerir y van a aceptar que la iniciativa privada colabore, contribuya y tenga un papel, y ese creo que es un cambio muy importante respecto del gobierno que está terminando ahora en 2024. El gobierno anterior traía un énfasis en que las empresas del Estado podían hacerlo todo, que debían hacerlo todo y que podían hacerlo y debían hacerlo a solas en términos de participación de privados, hay muy poquitos casos de proyectos privados en el sexenio anterior que fueron materializados, desarrollados y finalmente llevados a operación.

Prácticamente todo el énfasis fue “CFE puede contribuir”, “CFE puede hacer”, “Pemex puede hacer”, “Pemex debe hacer”, y creo que el cambio en el discurso donde, si bien, las empresas del Estado van a seguir teniendo un papel fundamental en la siguiente administración, ahora se habla abiertamente de un papel para la iniciativa privada, en el cual va a haber unas reglas, que habla de reglas claras, precisas y atractivas; donde yo no esperaría algo como la reforma de 2013, creo que esa reforma del 2013 vamos a tener que dejarla un poquito de lado, pero sí esquemas de colaboración como pueden ser contratos incentivados, desarrollos de llave en mano, proyectos de operación por cuenta en nombre de CFE y de Pemex, modelos que estaban vigentes antes del 2013 y que de alguna forma pueden funcionar si tienen un conjunto de incentivos adecuados.

¿Cuándo funcionan los contratos de servicios? Cuando el inversionista, el que está participando en el contrato de servicios, tiene un incentivo a tener un buen desempeño. Ese era el modelo, si te acuerdas, que desarrollamos en 2008 para Pemex, es un modelo limitado en el sentido de que la participación privada está acotada, el pago al privado también está acotado a un desempeño, no todo el “off side” se lo va a quedar el privado como sí lo haría, en un momento dado, con otro tipo de esquemas, participando de una gran parte del “off side” al Estado. Pero creo que de la nada que tenemos hoy en la administración saliente a un modelo de operación mixta en el cual tengas estas reglas donde van a poder participar los privados, es una buena noticia, estamos caminando hacia un espacio donde pueda participar la iniciativa privada. 

Retos y Oportunidades: ¿Cuáles considera que son los principales retos que enfrenta la nueva administración en el sector energético?

Dado este entorno, viendo en términos de la urgencia el tema de energía para el país ¿cuáles serían tus tres prioridades de atención más urgentes del sector de energía?

Yo pensaría que la urgencia mayor que tenemos se llama transmisión y distribución, tenemos algo de capacidad todavía de generación, finalmente es un sector donde puede participar cualquiera, pero la Constitución limita muy claramente las actividades de transporte de la energía a la CFE. En la medida en que no podamos mover energía barata o energía a secas a los grandes centros de producción y a los grandes centros industriales, las inversiones del “nearshoring” o de la relocalización no se van a materializar. Yo tengo una gran preocupación de que el “nearshoring” se va a quedar en una serie de anuncios en donde mes con mes estamos observando la inversión extranjera directa y lo que se está viendo es que prácticamente toda la inversión extranjera directa reportada por INEGI, por el Banco de México y por la Secretaría de Economía se trata de reinversión de utilidades, ¿qué quiere decir esto? que son empresas que ya están ubicadas en México, ya tienen sus centros de distribución, sus centros de producción y que están incrementando su presencia, pero no estamos viendo un movimiento masivo de empresas que no estuvieran en México ubicándose en el país; el principal cuello de botella que se ha identificado es el tema energético y en particular el tema de la transmisión y la distribución en el corto plazo.

Nuevo León, ustedes lo ven todos los días, sí tiene capacidad en alta tensión y lo que te está faltando son básicamente subestaciones para llevar la energía a la tensión adecuada para una actividad industrial. El estado de Querétaro tiene una situación muy similar a la de Nuevo León donde tienes, igual, posibilidades de tener energía de alta tensión, pero no tienes la posibilidad de bajarla a la industria como se requiere. Ahí, me parece que subestaciones, me parece que descuellamientos sería la actividad de cortísimo plazo y que puede ser también muy interesante para poder desarrollar un sector; obviamente, habiendo librado esta urgencia, lo siguiente sería fijar esa meta de generación que tienes para los siguientes 5, 10 o 15 años, preguntarle a CFE ¿cuánto de esta generación vas a tener recursos para atenderla? y seguramente serán recursos limitados para el tamaño del reto, entonces tendremos que encontrar esquemas de participación privada, a lo mejor participación mixta como decía al principio.

Esta participación pública-privada, siempre la vemos con Secretaría de Energía que es la cabeza del sector, pero ¿ves que la Secretaría de Economía este haciendo un papel relevantel ahí? no sé si de vinculación con el sector privado y la atracción de inversión?

Puede ser, de hecho, la Secretaría de Economía siempre ha tenido una participación importante, sobre todo cuando los inversionistas vienen de países con los que tenemos tratados de libre comercio, es la que aterriza de alguna manera las inversiones y pone en contacto a los expertos de las distintas dependencias; yo creo que se podría hacer una especie de “road show” en el que una vez que tengas definidas las reglas de participación público-privada salgas al mundo y digas “mira, este es el esquema, aquí están con toda claridad tus riesgos, aquí están con toda claridad los pagos que se pueden obtener” y a partir de ahí atraer las inversiones necesarias para complementar la inversión pública que por definición va a ser insuficiente.

Te daría un dato, se está hablando ahorita de un compromiso de invertir más o menos 14,000 millones de dólares en el sexenio, esos 14,000 millones de dólares son una cuarta parte mas o menos de lo que se comprometió en la COP26 para poder cumplir con las metas de cambio climático, mas o menos necesitamos unos 50,000 millones de dólares en energía renovable para poder estar a la altura del reto que se encomendó a México en los compromisos internacionales. 14,000 son muy buenos, pero se necesitan 50,000, entonces, esos recursos adicionales tienen que provenir de la iniciativa privada porque no hay una tercera fuente de ingresos, no hay una tercera fuente de inversión, simplemente es el sector público o es el sector privado y ahí está el reto donde siento yo que deberíamos empezar a ver cómo van a aterrizar estas reglas y qué es lo que se está previendo.

La Constitución tiene todas las herramientas del mundo para poder hacer esto que se pide, no tienes que hacer a fuerza contratos de riesgo, por ejemplo, para el caso de Pemex está todo el conjunto de contratos en donde puedes tener una licencia, puedes tener producción compartida, puedes tener utilidad compartida, puedes tener un contrato de servicios; creo que la clave está en fijar una meta, ver qué puede hacer el Estado Mexicano a través de sus empresas, y lo que no pueda comprometer y hacer el Estado mexicano a través de sus empresas y los recursos que la Secretaría de Hacienda puede asignarle a esas empresas, necesariamente es una brecha que hay que cerrar y ese cierre de brecha requiere instrumentos para atraer estas inversiones y empresas. 

Regulación y Normatividad: En tu experiencia, ¿qué papel tiene la regulación en el desarrollo y la expansión del sector energético en México? y quizás más bien, ¿cuáles serían las implicaciones de la eliminación de los Órganos Autónomos y la Reforma al Poder Judicial?

Recientemente me ha tocado ver que hay un panorama complejo, por un lado, la eliminación de los órganos autónomos, por otro lado, toda esta reforma del sistema judicial y pareciera que la expectativa o las perspectivas se mueven desde lo muy oscuro hasta un sector donde francamente como que no le hace daño todo esto; si hablas con abogados parece que les van a cambiar todo el marco jurídico, sienten como que el mundo se les está cayendo,  pero por otro lado ves empresas que dicen “yo estoy dentro de una cadena productiva, esta cadena está ligada con Estados Unidos, Canadá y otros países, y pues yo tengo que seguir operando, tengo planes de inversión hacia adelante y por lo tanto hay necesidades de energía y necesito soluciones de energía” entonces como es que hay esas dos visiones,  no sé si las estoy describiendo bien, pareciera algo muy oscuro, un ambiente muy pesimista de lo que viene hacia adelante, y un ambiente si bien no optimista si como diciendo “pues aquí vivimos y tenemos que seguir.

El país es gigante, el país tiene un crecimiento de la demanda eléctrica de más de 3% anual, es más que el producto, el producto está creciendo a uno y la demanda eléctrica está creciendo a tres, es elástica ampliamente como diríamos los economistas. También, si lo ves como economista, le estamos poniendo un mayor precio al riesgo, cuando me dicen “es que nadie va a invertir en México” yo lo que digo es “no, yo creo que la inversión va a seguir llegando, a lo mejor un poco más lenta, van a estudiar mucho más el caso”, pero lo que va a pasar es que en la medida en que cambia el poder judicial, en la medida en que tienes menos certeza sobre las reglas, pues vas a decir “sí voy a trabajar en México pero el premio que voy a pedir para la inversión va a ser mayor”, en otras palabras, la energía tendrá que subir de precio, tendrá que ser más cara para poder pagar por un riesgo mayor. Las empresas petroleras y eléctricas trabajan en todo el mundo y en condiciones adversas a veces; como se vislumbra un poder legislativo y un poder judicial no independiente, pero obviamente en la medida en la que tú sepas cuáles son las reglas, cuáles son los posibles efectos de un cambio de política pública, pues ni modo, los consumidores somos los que vamos a acabar pagando por ese mayor riesgo que van a enfrentar estas empresas.

Yo veo gente que también me dice “oye, pues es que mira la reforma de 2013, fue hace 10 años, pero mi empresa viene trabajando en México hace 50 o70 años”, si lo ves en ese horizonte de tiempo, la mayoría de las empresas del sector energía nacen en el siglo XX, están muy empapadas de mucho trabajo de muchos años y dicen “yo trabajaba en el esquema previo al 2013 y hacía buen negocio”; ¿qué tenía que hacer? tenía que cumplir con las reglas que me ponían en frente y yo las podía cuantificar, medir y trabajar con ellas, en el 2013-2014 también pude trabajar porque había reglas y las pude medir y trabajar, entonces, creo que lo que urge es que aterricen las reglas que tiene la nueva visión energética del país y ahora sí, los abogados se sientan, los financieros y los economistas a analizar riesgos, formas de mitigarlos y, de no mitigarse, defnes pagos en el sentido de premios a la inversión para poder asumir los riesgos correspondientes. El problema; como decía yo, vamos a acabar pagando energía más cara en la medida en que el esquema de menos garantías de certeza jurídica, de pago, de reglas inamovibles y de reguladores no autónomos, todo eso son elementos que van incrementando en términos del riesgo que va a asumir el inversionista en el país. 

El tema de decir que ya no va a haber inversión en México creo que es un exceso, como tú decías en la parte optimista la gente dice (los empresarios) “yo voy a enfrentarme un entorno de negocios, lo voy a analizar y voy a encontrar cómo trabajar en un país tan grande y tan interesante como nuestro país”.

Acciones Inmediatas: ¿Cuáles son los aspectos más críticos que deberían abordarse de manera inmediata por la nueva administración para mejorar el sector energético?

¿Cómo ves a Pemex? Hay toda una problemática, ya la conocemos, sabemos que se había insistido en la parte de refinación, sabemos que no está el negocio ahí, en fin, hay una serie de elementos, pero no sé si merece una propuesta de atención hacia cuáles debían de ser los primeros pasos para ponerle orden porque aparentemente el curso que lleva es un curso de empeorar sus finanzas, o sea, al final ese es el tema crítico y que nos lleva de la mano a todo el sector financiero, la parte de finanzas públicas y demás. 

Yo creo que el tema es dejar de perder dinero, hoy mismo se anunciaba o ayer que van a dejar de pagar el derecho de utilidad compartida de mayo a la fecha, como también a finales del año pasado se dejó de pagar el DUA, pero ni siquiera dejando de pagar derechos Pemex sale con un balance positivo. ¿Qué está pasando? que se está metiendo en actividades poco rentables, yo creo que lo primero que habría que hacer es evaluar cuál es la productividad de cada refinería, ver la dieta, quitarnos a lo mejor la idea de dejar de importar el petróleo. 

La administración previa a la que termina importaba petróleo ligero que era mezclado con el petróleo producido en México y generaba una dieta adecuada para cada tipo de refinería que tenemos en el país, a partir de 2019, en enero de 2019, se suspendieron todas las importaciones de crudo ligero y entonces empezamos a darle petróleo como dieta a las refinerías, con alto contenido de azufre y con un gran peso, o sea, el crudo pesado. Eso generó una gran cantidad de combustóleo que no sabemos qué hacer con él, no sabemos dónde colocarlo; entonces, empezar por ahí, decir “vamos a hacer que en vez de tener objetivos volumétricos, regresemos a buscar que sean objetivos de rentabilidad por refinería” y hay gente que dice que hay que dejar Dos Bocas y digo que no.

Yo creo que Dos Bocas va a ser la refinería más moderna del país, vamos a tener que a lo mejor invertirle un poco más, ya está muy sobrepasado el presupuesto pero pues ya está puesto ahí, ahora lo que hay que hacer es que eso funcione. Tienes máquinas de última generación, te falta a lo mejor una planta de generación eléctrica de buen tamaño, te falta a lo mejor un ducto para desalojar el producto hacia Tuxpan, pero lejos de parar Dos Bocas, Dos Bocas debería ser la única refinería, digamos que la refinería que diera sustento al centro de del país y las demás refinerías hay que evaluar si es bajar la dieta, generar menor producción pero más rentable o incluso cerrar algunas; Madero podría cerrarse, es una refinería muy ineficiente, muy vieja,  pero ese análisis no sé si lo vayan a hacer, ese es el problema. Ahora, la Secretaría de Hacienda se supone que va a tomar el control de las finanzas de Pemex y de CFE, alguna medida tendrá que tomar para eficientar y acabar con esta pérdida continua de recursos y destrucción de valor que se está dando.  

Ahora, ¿en dónde se deben enfocar los recursos? pues todos sabemos que el petróleo es mucho más rentable, el petróleo tiene un mercado internacional y tenemos muchos campos maduros abandonados, tú recordarás que cuando nos movimos a Cantarell se abandonó toda la cuenca terrestre prácticamente desde San Luis Potosí, Tamaulipas y Veracruz y hay una serie de Campos maduros bien calculados, bien identificados, con reservas, que nadie los está produciendo. Yo creo que un gran proyecto de campos maduros donde pudieras meter tecnología y donde pudiera haber contratos de servicios con particulares sería un “hit” en términos de producción, yo me imagino que puedes generar alrededor de unos 100,000 o 150,000 barriles diarios de puro campo maduro y le das una gran cantidad de trabajo a estas empresas de servicios que tienes en toda la república y empiezas a mover una industria que está relativamente parada. 

¿Qué necesitas hacer? un contrato de servicios bueno, que de un pago por desempeño y que tenga garantía de pago porque hoy en día el problema es que Pemex no está pagando a los proveedores, si tú te vas a meter en un contrato tu banco te va a decir “ es que no tengo garantía de pago y no te puedo aguantar 2 años sin pago” entonces ¿qué se puede proponer? un fidecomiso de pago, imagínate que tú dijeras “a ver está este yacimiento o este campo, vamos a poner un fidecomiso donde vas a tener un paso previo a entrar a la tesorería que vamos a pagar primero por los servicios y luego de servicios entra el dinero a la tesorería” eso sería una maravilla porque tú puedes ir al banco y le dices “ya sé que Pemex no le ha pagado a los proveedores en los últimos 10 años pero aquí está este fideicomiso de pago donde se van a afectar los recursos primero para pagar al proveedor y ya después se va a ir a la Tesorería”, con eso detonas todos estos casos; hoy no tienes nada, imagínate tú como hacendario que dirías “ah mira, es que tiene que entrar a la tesorería y ya luego que de ahí se vaya a Pemex”, pero ¿qué pasa cuando regresa a Pemex? siempre hay un uso alternativo de los recursos, siempre hay necesidades y los proveedores están en la cola de las necesidades de Pemex, entonces, si tú resuelves un esquema en donde se pueda pagar con el mismo campo, no estás pidiendo que venga dinero de otros recursos o de otro  sistema de ingresos, del propio campo que lo pague al proveedor; hoy no está recibiendo ni el petróleo ni los ingresos de ese campo; ¿qué tan difícil sería decir vamos a hacer este compromiso y esta garantía de pago? no lo sé, se intentó en esta administración, no hubo éxito, parece que alguien no lo vio con algún sentido jurídico o algún sentido práctico, pero creo que si no hay garantía de pago va a ser bien difícil.

Ese es un tema muy importante para detonar el desarrollo de sectores y de regiones que ahorita francamente está caído, los nombramientos de la directora general de CFE y del director general de Pemex, percibo un cambio ¿cuál es tu opinión? 

Creo que son perfiles técnicos, gente que ha estado en el sector por muchos años, gente que tiene una opinión fuerte sobre la presencia de las empresas del Estado en la entrega y la producción de energía, pero el cambio para mí fundamental es que la técnica va a estar a la cabeza de estas instituciones y creo que mucho del problema de la administración que está terminando es que la técnica no llegaba a la toma de decisiones, muchas decisiones se veían erradas por el propio personal técnico de las empresas; entonces, esa capa de pasar la ideología, que es válida, todos tenemos alguna ideología, pero pasarla por el matiz técnico me parece que es un cambio muy significativo donde vas a decir “yo quiero llegar a este objetivo” aun cuando el discurso político diga “vas a llegar a ese objetivo”, tú vas a poder decir, como director de Pemex o directora de la CFE, si se va a poder alcanzar o no porque ya traes en la cabeza un modelo técnico de cómo funciona el sector energía, yo también percibo ese cambio. 

Son noticias importantes, en particular Víctor Rodríguez estuvo muchos años metido en las reformas energéticas, en la de 2008 en particular de contratos incentivados, él la conoce muy bien y le pareció atractiva en su momento,  entonces ahí creo que hay una beta de oportunidad pues es un modelo previo al de 2013 pero que puede dar resultados y que puede ser sustentable en términos políticos de que no tenga las críticas que se tienen por parte de algún segmento de la población hacia un modelo de Mercado; entonces, yo también lo percibo, como algun tema un poco diferente en términos del perfil que se escogió para estas instituciones, y lo mismo la Secretaria de Energía,  la Secretaria de Energía es una financiera muy capaz y también te da ese perfil la idea de que van a meter mucho énfasis a cómo hacer que estas empresas no impliquen el costo que son hoy para el presupuesto.

¿Cuál sería tu mensaje para los empresarios que están en el sector de energía en términos de, como bien ya decías, hay varias de estas empresas que han estado por tiempo atrás y pues han estado en las buenas y en las malas? yo mismo que he estado en ese sector me ha tocado ver la resiliencia que tienen varias de estas empresas y encuentran siempre sus nichos para continuar. ¿Cuál sería tu recomendación en base a este entorno que viene? y obviamente pues hay empresas grandes muy sólidas, pero hay empresas también medianas y hay empresas pequeñas que entraron en la ola de esta última reforma pensando “oye pues voy a entrarle y de repente esto se movió.”

Pues mira mi mensaje sería que tenemos una visión todavía no aterrizada de parte del nuevo gobierno pero ya sabemos cuáles son las restricciones que vamos a tener, esas sí las tenemos muy claras, es un modelo en el que Pemex y CFE tengan alguna participación pequeña o grande pero van a tener que tener alguna participación en las actividades que desarrollen en adelante, una participación social, va a tener que ser inversión adjetivadas donde digas “no es solamente la inversión por la inversión” sino que tienes que plantearla de alguna forma en términos de los beneficios que va a tener la sociedad,  los beneficios que va a tener el medio ambiente. Yo diría que vale la pena adelantarse y decir “mira yo ya vi las restricciones, en economía lo hacemos así, tú optimizas con una restricción, si tú conoces la restricción, ahora hay que buscar el mejor modelo dada la restricción que ya tenemos”. 

“Me gustaría el modelo del 13” a mí también me encantaría el modelo del 13  pero ¿qué pasa? lo que tenemos hoy es una administración que no se va a apegar a ese modelo, va a buscar un modelo alternativo más basado en una partición, entonces, ya tenemos la restricción, dada  esa restricción ¿dónde podemos obtener el mejor beneficio para México como un todo? y ya de ahí se decanta el beneficio la empresa, el beneficio para la comunidad y todo eso; entonces, creo que ahí las asociaciones podrían empezar a desarrollar estas alternativas de decir “a ver, gobierno estatal primero” que van a ser grandes interlocutores, nuestros gobernadores, porque todos los gobernadores quieren inversión en su estado, decir “mira ya entendimos qué quiere la Presidenta y este es el modelo que pudiera ayudarle y que cumple con participación de Pemex, participación de CFE” y qué puede ser, pues una acción dorada, un “Golden Share”.

A lo mejor que ponga poquito capital CFE pero que dentro del gobierno corporativo tenga una decisión en temas muy importantes, de decir si vas a desinvertir, si vas a invertir, si vas a tener alguna decisión grande, porque las mayorías ahora que se habla de super mayorías en la empresa sea incluyendo al pequeño capital que pudiera meter CFE o PEMEX, pero empezar a ser creativos en ese sentido y no esperar. Yo veo mucha pasividad, con todo respeto, y mucho esperar a que nos digan qué es lo que van a ofrecer como administración, y creo que ahí Nuevo León siempre ha sido proactivo, tiene una larga historia, yo me acuerdo cómo recibía en la SENER a los empresarios de Nuevo León siempre era “ah tú quieres hacer esto, pues esto es lo que puede solucionar” y ya le decías “no, pero en esta parte no, pero en esta sí” y ya te regresaban a las tres semanas otra vez con una propuesta. 

Entonces, esa parte proactiva creo que deberíamos de fomentarla y empezar a llenar el espacio porque si no, va a ser otro sexenio en el que vamos a estar recibiendo y recibiendo y recibiendo información y vamos a estar diciendo “oye no, es que este modelo no es el que pudiera ser el mejor dada la restricción” entonces una invitación a ser proactivos, ahí están las negociaciones, los empresarios del estado y los gobernadores de Tamaulipas, de Nuevo León, Coahuila, de la región, tengan un papel activo también para ayudar a desarrollar todas las regiones.

Muchas gracias Guillermo, siempre un placer reflexionar sobre los temas de energía en México contigo. Gracias.

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