Por Energy Insights
Introducción
De acuerdo con la Agencia Internacional de Energía (AIE) las ventas de autos eléctricos continúan rompiendo récords a nivel mundial, impulsadas principalmente por China y otras economías emergentes. En 2024, las ventas globales superaron los 17 millones de unidades, alcanzando una cuota de mercado superior al 20%. El incremento de 3.5 millones de autos eléctricos vendidos ese año, en comparación con el año anterior, supera el total de ventas de 2020. China lidera este mercado, con los autos eléctricos representando casi la mitad de todas sus ventas de automóviles en 2024. Con más de 11 millones de autos eléctricos vendidos el año pasado, China igualó las ventas globales de apenas dos años atrás. Actualmente, 1 de cada 10 autos en las calles chinas es eléctrico. En Europa, las ventas se mantuvieron estables en 2024 debido a la disminución de subsidios y políticas de apoyo; sin embargo, la cuota de mercado de autos eléctricos se conservó en un 20%, gracias a un equilibrio entre países con ventas fuertes y débiles. En Estados Unidos, las ventas crecieron un 10% interanual, representando más de 1 de cada 10 autos vendidos.
Crecimiento de los mercados emergentes
Los mercados emergentes en Asia y América Latina se están consolidando como nuevos centros de crecimiento, con las ventas de autos eléctricos aumentando más del 60% en 2024, alcanzando casi 600,000 unidades, un volumen comparable al del mercado europeo hace cinco años. En el Sudeste Asiático, las ventas crecieron casi un 50%, representando el 9% de todas las ventas de automóviles en la región, con participación significativamente mayor en países como Tailandia y Vietnam. En Brasil, el mayor mercado automotriz de América Latina, las ventas de autos eléctricos se duplicaron, llegando a 125,000 unidades, y alcanzando una cuota de mercado superior al 6%. En África, las ventas también se duplicaron, principalmente en Egipto y Marruecos, aunque los autos eléctricos aún representan menos del 1% del total de ventas en el continente. El apoyo de políticas públicas y las importaciones relativamente accesibles desde China jugaron un papel clave en el aumento de ventas, representando el 85% de las ventas de autos eléctricos en países como Brasil y Tailandia. En todas las economías emergentes fuera de China, las importaciones chinas representaron el 75% del incremento en las ventas de autos eléctricos en 2024.
Perspectivas de Crecimiento en las Ventas de Autos Eléctricos para 2025
La AIE prevé que China, Europa y las economías emergentes lideren el aumento en las ventas de autos eléctricos. Para 2025, se estima que las ventas mundiales superen los 20 millones de unidades, representando más de una cuarta parte de todos los autos vendidos en el mundo. En los primeros tres meses de 2025, las ventas crecieron un 35% interanual, con récords trimestrales en los principales mercados. En China, la continuación de los incentivos para reemplazar vehículos antiguos y la reducción de precios de los autos eléctricos hacen prever que alcancen cerca del 60% del total de ventas de autos en 2025. En Europa y el Reino Unido, las normas de emisiones exigirán cuotas más altas de ventas de vehículos de cero emisiones en 2025. Con un crecimiento del más del 20% en el primer trimestre, se espera que estas políticas impulsen las ventas europeas hasta una cuota del 25%, pese a la flexibilidad otorgada a los fabricantes para cumplir los objetivos de reducción de emisiones. En Estados Unidos, aunque las perspectivas para todo 2025 son inciertas debido a políticas actuales, se estima que las ventas mantendrán un crecimiento del 10% en el primer trimestre, alcanzando alrededor del 11% del total anual de ventas de automóviles, impulsadas por los créditos fiscales que aún están disponibles. En las economías emergentes, además de China, se prevé un crecimiento fuerte con un aumento del 50%, llevando las ventas a aproximadamente 1 millón de unidades en 2025.
Perspectivas y Retos para la Participación de Autos Eléctricos en 2030
La AIE estima que, pese a las incertidumbres, la cuota de autos eléctricos superará el 40% en 2030 bajo las políticas actuales. China seguirá liderando el mercado, alcanzando una participación cercana al 80%, impulsada por un fuerte crecimiento y precios competitivos. En Europa, los objetivos de reducción de emisiones de dióxido de carbono proyectan una cuota del 60% para 2030, aunque ligeramente por debajo de las estimaciones del año pasado. En Estados Unidos, la participación será mucho menor, aproximadamente del 20%, reflejando una reducción respecto a las proyecciones previas. En el Sudeste Asiático, el apoyo político y la capacidad de manufactura local impulsarán para 2030 una cuarta parte de los autos vendidos en la región sean eléctricos. Además, los vehículos de dos y tres ruedas se electrificarán más rápidamente; para esa fecha, casi uno de cada tres de estos vehículos será eléctrico. A nivel global, el despliegue de vehículos eléctricos reemplazará el uso de más de 5 millones de barriles de petróleo por día en 2030, siendo la mitad de estos ahorros provenientes de China, lo que representa un avance importante en seguridad energética.
No obstante, factores como la evolución del comercio, las políticas industriales, el escenario económico, los precios del petróleo y posibles aranceles podrían afectar la adopción de vehículos eléctricos y el mercado automotor en general. Los costos más altos podrían elevar el precio de los autos, incluidos los eléctricos, mientras que un menor crecimiento del PIB y los bajos precios del petróleo podrían reducir las ventas y los ahorros en combustible. Aunque estos riesgos son variados, parece que afectan más el volumen total de ventas que la cuota de participación de los autos eléctricos. En China, el apoyo político sostenido y los precios competitivos sugieren que las ventas pueden resistir estos desafíos. En Europa, la mayor diferencia de precio con los autos convencionales y las políticas a largo plazo hacen probable mantener las ventas de vehículos eléctricos. Aunque los bajos precios del petróleo disminuyen los ahorros en combustible, incluso con un precio de referencia de 40 USD por barril, los autos eléctricos siguen ofreciendo ahorros significativos en todos los mercados principales, especialmente si se recarga en casa. En China, la carga rápida pública, aunque cuesta aproximadamente el doble que la carga doméstica, sigue siendo una opción más económica para los propietarios en comparación con los autos convencionales.
Comercio Global de Autos Eléctricos
El comercio global de autos eléctricos continúa creciendo a medida que los fabricantes expanden su presencia en nuevos mercados. China sigue siendo el principal centro de fabricación, responsable de más del 70% de la producción mundial de vehículos eléctricos (VE). La mayoría de las empresas automotrices con sede en China destinan aproximadamente el 80% de sus ventas internas a su mercado nacional, contribuyendo a casi todo el crecimiento del 25% en la producción global de VE en ese año. En la Unión Europea, la producción se mantuvo en 2.4 millones de autos eléctricos en 2024, sin cambios significativos.
En América del Norte, se observan tendencias contrastantes: la producción en Estados Unidos disminuyó, mientras que en México se duplicó, impulsada por costos de manufactura relativamente bajos, con alrededor del 70% de los autos producidos en México provenientes de fabricantes estadounidenses. En Asia-Pacífico, excluyendo a China, la producción aumentó un 15%, alcanzando cerca de 1 millón de autos, principalmente de fabricantes consolidados en Japón y Corea.
El comercio mundial de autos eléctricos creció un 20% en 2024, con las importaciones representando casi una quinta parte de las ventas globales. China fue responsable del 40% (casi 1.25 millones de unidades) de las exportaciones internacionales, consolidándose como el mayor exportador. La Unión Europea también mantuvo su estatus como exportador neto, con exportaciones que superaron las 800,000 unidades, principalmente a otros países europeos como el Reino Unido y a América del Norte, mientras que sus importaciones excedieron los 700,000 autos, de los cuales el 60% provino de China. Estados Unidos permaneció como un importador neto, con un aumento cercano al 40% en las importaciones y una caída del casi 15% en sus exportaciones.
Los mercados de exportación chinos se están diversificando a medida que los fabricantes avanzan en países como Brasil, México y la región del Sudeste Asiático. La adopción reciente o en evaluación de aranceles en estos mercados ha llevado a los fabricantes chinos a adelantar sus exportaciones antes de la entrada en vigor de dichas tarifas, o a buscar nuevos destinos para su producción. Actualmente, la capacidad de fabricación extranjera de fabricantes chinos representa aproximadamente el 5% de las ventas en mercados emergentes, con expectativas de crecimiento en los próximos años.
Accesibilidad de los autos eléctricos
La competencia y la caída en los precios de las baterías están mejorando la accesibilidad de los autos eléctricos, aunque el progreso varía según los mercados. A nivel mundial, el precio promedio de los autos eléctricos a batería disminuyó en 2024, pero en muchos mercados aún persiste una brecha significativa frente a los autos convencionales. Por ejemplo, en Alemania, el precio de un auto eléctrico se mantuvo un 20% por encima del modelo convencional equivalente, mientras que en Estados Unidos el costo eléctrico sigue siendo un 30% más alto, lo que limita las expectativas de crecimiento en ventas futuras.
En contraste, en China, dos tercios de todos los autos eléctricos vendidos en 2024 tuvieron precios inferiores a los de autos convencionales similares, sin contar incentivos gubernamentales, lo que estimuló las ventas incluso con la reducción de subsidios públicos. Los modelos chinos suelen ser más económicos que el promedio de los vehículos eléctricos en los mercados emergentes, fortaleciendo su competitividad. En Tailandia, el precio de un auto eléctrico ya es comparable al de un vehículo convencional, con modelos chinos aún más asequibles en promedio.
En Brasil, la diferencia de precio entre autos eléctricos y convencionales se redujo al 25% en 2024, desde más del 100% en 2023, impulsada por un aumento en las importaciones chinas, que representaron el 85% de las ventas de VE en el país. De manera similar, en México, la prima de precio de los autos eléctricos bajó al 50% en 2024, desde más del 100% en 2023, con las importaciones chinas constituyendo dos tercios de las ventas.
Por otro lado, la disminución en los precios de los minerales críticos y la creciente competencia entre fabricantes de baterías redujeron los costos de los paquetes en todos los mercados en 2024, aunque con diferencias notables. En China, los precios cayeron aproximadamente un 30%, comparado con una reducción del 10-15% en Europa y Estados Unidos, gracias a una competencia intensa, mejoras en la eficiencia de fabricación, integración en la cadena de suministro y acceso a mano de obra calificada, lo que amplía la ventaja competitiva de los fabricantes chinos de baterías.
Infraestructura de Carga para Vehículos Eléctricos
Mejorar la cobertura, capacidad e integración de la red de carga es fundamental para ampliar la adopción de vehículos eléctricos. Las estaciones de carga públicas se han duplicado en los últimos dos años para acompañar el crecimiento en ventas de VE. China y la Unión Europea mantienen un ritmo estable en el despliegue de cargadores en relación con el número de VE en circulación. Sin embargo, en Estados Unidos y el Reino Unido, donde el acceso a cargadores domésticos es mayor, el ritmo de expansión de la infraestructura pública no ha seguido el incremento en la adopción de VE, provocando un aumento en el número de vehículos eléctricos ligeros por punto de carga pública en 2024.
La capacidad de carga es un indicador clave de la suficiencia de las redes públicas. El número de cargadores ultrarrápidos, con potencias de 150 kilovatios o más, creció aproximadamente un 50% en 2024, representando casi el 10% del total de cargadores públicos rápidos. Los cargadores más lentos en zonas urbanas siguen siendo una solución práctica para quienes no tienen acceso a carga en casa, mientras que los cargadores rápidos en carreteras facilitan viajes de larga distancia. En Europa, más del 75% de las autopistas cuentan con estaciones de carga rápida cada 50 kilómetros, en comparación con menos de la mitad en Estados Unidos.
A nivel mundial, la capacidad de carga pública necesaria para vehículos eléctricos ligeros debe multiplicarse casi por nueve hasta 2030 para respaldar el nivel de ventas proyectado por las políticas actuales. Sin embargo, se estima que, para esa fecha, los vehículos eléctricos representarán solo el 2.5% del consumo total de electricidad global.
Política de Electromovilidad Global
Los esfuerzos gubernamentales para promover la interoperabilidad, la estandarización, la carga inteligente y la integración vehículo-red (vehicle-to-grid) son clave para facilitar la adopción de vehículos eléctricos, tanto para los conductores como para los operadores de redes. Tecnologías como los cargadores inteligentes y los modelos de VE compatibles con vehicle-to-grid son cada vez más accesibles, pero la implementación efectiva requerirá nuevas estructuras de mercado y marcos legales que permitan maximizar los beneficios potenciales para la red.
China y el Reino Unido se destacan por la puesta en marcha de políticas y proyectos de demostración en estas áreas. Además, los avances tecnológicos en baterías en los últimos años están permitiendo cargas de alta potencia seguras, que podrían equivaler en rapidez a repostar un auto convencional. Sin embargo, aprovechar al máximo estos avances dependerá del despliegue de infraestructura adecuada para soportar estas tecnologías.
Transporte Pesado Eléctrico
La propuesta de valor de los camiones eléctricos está mejorando, incluso para operaciones de larga distancia. En 2024, de acuerdo con la AIE las ventas globales de estos vehículos crecieron casi un 80%, alcanzando cerca del 2% del total de ventas de camiones. Impulsadas por un nuevo programa de chatarreo de camiones convencionales, las ventas en China se duplicaron hasta 75,000 unidades, representando más del 80% de las ventas mundiales en ese año. En Europa y los Estados Unidos, las ventas se mantuvieron similares a las de 2023. Además, el número de modelos de camiones eléctricos a batería disponibles aumentó de menos de 70 en 2020 a más de 400, ampliando las aplicaciones posibles.
El costo total de propiedad de un camión eléctrico pesado ya es inferior al de uno diésel en ciertos casos en China. Aunque el precio de compra de estos camiones sigue siendo de dos a tres veces mayor que el de los camiones diésel en los principales mercados, una mayor eficiencia y costos de energía más bajos —incluso considerando los gastos en cargadores de alta potencia— hacen que sean más atractivos cuanto más se utilicen. Para 2030, se espera que en Europa y Estados Unidos los camiones eléctricos igualen el costo total de propiedad de los diésel en operaciones de larga distancia, como ya sucede en China, y que sigan siendo más rentables que los camiones de pila de hidrógeno. Sin embargo, la elección tecnológica dependerá del perfil de uso y las necesidades específicas de cada camión, por lo que se podría requerir un análisis caso por caso para evaluar las mejores alternativas.
Por otra parte, los periodos de descanso obligatorios para conductores de camiones pueden influir en la eficiencia y el costo de carga en ruta. Para el transporte de larga distancia, el tiempo de recarga puede ser un obstáculo, pero el período de descanso de 45 minutos en la Unión Europea permite agregar aproximadamente 150 km de autonomía mediante cargadores de 350 kW, e incluso hasta 400 km si se usan cargadores de megavatios. Aunque Estados Unidos y China también tienen períodos de descanso obligatorios, la política de la UE es actualmente la más favorable para fomentar la adopción de vehículos eléctricos.
Implicaciones para México
Las implicaciones para el mercado mexicano de vehículos eléctricos serían las siguientes:
1. Potencial de crecimiento y oportunidad de mercado: México podría aprovechar el crecimiento global de ventas de autos eléctricos, que en 2024 superaron los 17 millones y se proyectan que en 2025 superen los 20 millones. La expansión en mercados emergentes y la reducción en los precios de las baterías sugieren que la adopción de vehículos eléctricos en México podría acelerarse si se implementan políticas adecuadas y se fortalecen infraestructuras.
2. Necesidad de infraestructura de carga avanzada: La importancia de la infraestructura, especialmente la rápida y ultrarrápida, es clave para aumentar la adopción de vehículos en México. El desarrollo de redes de carga en movilidad urbana y rutas de larga distancia, además de la implementación de cargadores de alta potencia, facilitaría viajes más largos y reduciría el “estrés de autonomía”, incentivando a los potenciales usuarios.
3. Políticas públicas y normativas: México puede tomar como ejemplo a China, Europa y Reino Unido, promoviendo políticas de incentivos, estandarización, interoperabilidad y carga inteligente. Implementar programas de apoyo que incluyan incentivos fiscales, subsidios y regulación favorable puede acelerar la incorporación de vehículos eléctricos en flotas públicas y privadas.
4. Electromovilidad en transporte pesado y logístico: Dado el crecimiento de la propuesta de valor de los camiones eléctricos, México tiene la oportunidad de explorar su adopción en el transporte de larga distancia, logística y transporte de carga pesada. La tendencia mundial hacia la rentabilidad y menor costo total de propiedad en camiones eléctricos, junto con beneficios en eficiencia y menor impacto ambiental, es particularmente relevante para un país con gran peso logístico y de transporte de mercancías.
5. Diversificación y fortalecimiento de la industria local: La creciente innovación tecnológica y el aumento en la fabricación de modelos de vehículos eléctricos y baterías abren oportunidades para que México desarrolle una industria local de componentes, ensamblaje y servicios relacionados con la electromovilidad, creando empleos y fomentando inversiones.
6. Retos regulatorios y de adaptación: México debe adecuar su marco legal para facilitar la integración de tecnologías como vehicle-to-grid, cargadores inteligentes y estándares de interoperabilidad. Además, sería necesario definir políticas que favorezcan la entrada de infraestructura de carga rápida y ultrarrápida, además de promover la utilización de energías renovables para cargas más sostenibles.
México tiene un escenario prometedor para avanzar en la electromovilidad, siempre y cuando adapte sus políticas, infraestructura y capacidades industriales a las tendencias globales, fomentando un ecosistema favorable para la adopción acelerada de vehículos eléctricos en todos los segmentos de mercado.